«…Barcos que pasan por la noche
y ni se saludan ni conocen.
¿Qué sé?
¿Qué sé?
¿Qué busco?
¿Qué siento?
¿Qué pediría si tuviese que pedir?
Cuántas veces, presa de la superficie y del hechizo, me siento hombre.
Entonces vivo con alegría y existo con claridad.
Sobrenado.
Y me resulta agradable recibir la paga e irme a casa.
Siento el tiempo sin verlo,
Cuántas veces, presa de la superficie y del hechizo, me siento hombre.
Entonces vivo con alegría y existo con claridad.
Sobrenado.
Y me resulta agradable recibir la paga e irme a casa.
Siento el tiempo sin verlo,
y me gusta cualquier cosa orgánica.
Si medito, no pienso.
Esos días me gustan mucho los jardines.
¡El peso de sentir!
Si medito, no pienso.
Esos días me gustan mucho los jardines.
¡El peso de sentir!
¡El peso de tener que sentir!
…el sagrado instinto de no tener teorías…»
…el sagrado instinto de no tener teorías…»
Fernando Pessoa (Libro del desasosiego)

