(lluvia de flores en Bernal)
«Abro la puerta. Entra la magnífica invitada que viene de lejos. En las manos trae sus regalos, los regalos de horas y momentos esclarecedores, los regalos de mañanas y atardeceres, el regalo de la primavera y el verano, el regalo del otoño y el invierno. Debe haber buscado en los cielos hasta conseguir dones tan extraños…»
-Abbie Graham
Mariposadel67 
Los colores del otoño son mis colores. Diría, además, que su ánimo es el mío.
Un beso, sembradora de belleza.
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Ohhhhhhh! Gracias Vero! Me emocionaste mucho con lo que me dijiste!! Yo tengo un milagrito que año a año me regala esos colores en mi jardín. Un precioso árbol, llamado «Crespon» (Lagerstroemia indica) que es un espectáculo a los sentidos.
Después que caen las hojitas, me acuerdo de mi parte de niña y me tiro de lleno en ese colchoncito bello. Qué recocijo! 🙂
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Esos tonos son maravillosos. No soy gran amante de las flores pero amo las hojas rojizas como las el árbol nacional de Canadá (¿cómo se llamará? padres ingenieros forestales y yo, tan ignorante) y también, los clásicos ocres dorados. 🙂
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Si! Es preciosa esa hoja rojiza. No es un arce? Este otoño tardo en llegar… pero es hermoso cuando llega. Me la paso mirando para arriba la copa de los árboles. Donde yo vivo hay muchos. Una delicia.
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Que bonito texto 🙂
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Viste que belleza! Contiene el universo de todas las estaciones!!
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