.bonhomía

«Los días vividos en la oscuridad dejan hambrientas las retinas.

Insistimos en navegar desorientados entre tinieblas

cuando la luz está al alcance de un latido sincero.

Inconscientemente

continuamos recreando los personajes que nos salvaron de niños

pero que ahora

nos siegan la alegría acortando la vida.

Somos seres con la naturaleza del Fénix en las entrañas.

Olvidamos que hay algo esencialmente bueno en el ser humano,

pero ELLA

es la única persona que conozco que SIEMPRE lo tiene presente.

Cuando dejas de creer en ti

refleja la luz de tu alma olvidada.

Te recuerda que el mundo espera que lo abraces

que lo vistas de colores, como solo tú, puedes hacer.

Con su mirada prístina, te ve
eleva tu diferencia y te conecta con ella.

Te hace vibrar en otra frecuencia.

Maravillosa pacificadora, nueve de eneagrama,

te sostiene en la caída y en su abrazo, te crea nuevas alas.

No necesita palabas pero siempre tiene el verbo y la mirada justa para abrigarte el alma.

Ella ES y ESTÁ, SIEMPRE…»

– Cristina Mulero  («Mujer Fénix»)