
(cielo de Bernal)
«Si duermo entre dos celestes
como un camalote abierto
si sueño, líquida la espalda,
nubes que pasan
y flotando seguirlas
en el cauce, el viento
algo desde mi fondo
se desprende y sube
una moneda sumergida
en burbujas resuena
y se levanta
una voz.
Esta es la gracia:
quien recibe
vibra
y tañe
la propia nota.
Una pequeñez entre el agua
y el cielo, canta
su música es eco de la luz
que la sostiene.»
-Mariana Rosa
