
«Oh escondido panal.
Hay una fuerza oscura
que nos llama.
Descalzos días
donde la miel se hizo
poco a poco.
Luces doradas que las horas velan.
Oh morada escondida.
Fuerza secreta
que empujó nuestros pasos,
que nos arroja al fuego
para arder vivos siempre.
En la pequeña habitación
la derretida cera
destilaba perfumes,
besos, alas.»
-Ángeles Mora

Delicioso como un helado de nomeolvides
Me gustaMe gusta
Hmmmmmmm… me dio un antojo de comer un helado que no existe! (y ahora, qué hacemos, mi pequeño ser…?)
🙂
Me gustaMe gusta