«Y fue a esa edad… Llegó la poesía
a buscarme. No sé, no sé de dónde
salió, de invierno o río.
No sé cómo ni cuándo,
no, no eran voces, no eran
palabras, ni silencio,
pero desde una calle me llamaba,
desde las ramas de la noche,
de pronto entre los otros,
entre fuegos violentos
o regresando solo,
allí estaba sin rostro
y me tocaba.
Yo no sabía qué decir, mi boca
no sabía
nombrar,
mis ojos eran ciegos,
y algo golpeaba en mi alma,
fiebre o alas perdidas,
y me fui haciendo solo,
descifrando
aquella quemadura,
y escribí la primera línea vaga,
vaga, sin cuerpo, pura
tontería,
pura sabiduría
del que no sabe nada,
y vi de pronto
el cielo
desgranado
y abierto,
planetas,
plantaciones palpitantes,
la sombra perforada,
acribillada,
por flechas, fuego y flores,
la noche arrolladora, el universo.
Y yo, mínimo ser,
ebrio del gran vacío
constelado,
a semejanza, a imagen
del misterio,
me sentí parte pura
del abismo,
rodé con las estrellas,
mi corazón se desató en el viento.»
-Pablo Neruda (Memorial de Isla Negra,1964
Hola Gabi, tanto si leerte, te dejo mucho cariño y besos.
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GRACIAS preciosa!!! Buena noche!
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Neruda es para disfrutar sin culpa y sin intentos de imitación. Por eso leo, muda, en silencio.
Mil besos, Gabi
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Y esta noche especialmente estrellada, se aúna, para ello, amiga.
Abrazos!
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Bienvenida mariposa bello todo, bella tu
Desde Mardel con amor
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Ya te veo arriba, desde la ola, amiga! 🙂
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Gabi, mi amiga, te me habías perdido de nuevo. No sé por qué no me llegan los emails cuando publicas. Pero que bueno que te encuentro, mi corazón. Me hacen falta tus cartas de amor. A ver si encuentro alguna, hoy que por fin encontré tu blog. Me pasearé un ratito por aquí. Abrazos, mi querida.
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Hola querida Mel… es que no estoy publicando últimamente.
Ya volveré a publicar, tesoro.
Mientras tanto, te dejo este hermoso fragmento.
Hermosa semana! Y un abrazo lleno de luz y cariño!
Gabi
“ Hay que dormir con los ojos abiertos,
hay que soñar con las manos,
soñemos sueños activos de río
buscando su cauce, sueños de sol soñando
sus mundos, hay que soñar en voz alta,
hay que cantar hasta que el canto
eche raíces, tronco, ramas, pájaros, astros. ”
Octavio Paz
(Fragmento de El cántaro roto)
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¡Qué belleza! Gracias, amiga.
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Por nada! 😉
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