«Podés
morir por él-
sea una idea
o el mundo. La gente
así lo hizo,
brillantemente,
dejando
que sus pequeños cuerpos ardieran
en la hoguera,
creando
una inolvidable
furia de luz. Pero
esta mañana,
subiendo las colinas familiares
en el familiar
tejido del amanecer, pensé
en China,
en India,
en Europa, y pensé
en cómo el sol
centellea
para todos
tan alegremente
mientras sube
por debajo de las pestañas
de mis propios ojos, y pensé
¡soy tanto!
¿Cuál es mi nombre?
¿Cuál es el nombre
de la profunda bocanada que yo tomaría
una y otra vez
por todos nosotros? Llamalo
como quieras, es
la felicidad, es otra
de las formas de entrar
al fuego.»
-Mary Oliver
Credits: Fran Dakoff