«Mirar detrás del vidrio mi jardín… con viento… con lluvia… a pleno sol o en una noche estrellada.
Silencio… cortado por algún trinar o el croar de las ranas.
Movimiento imperceptible, danza única, hojas que caen… flores que se abren la vida… y mi vida…
El sol irá cambiando su viaje y ellas, las plantas, comenzarán a despedir sus hojas para guardar la savia.
Allí quedaré esperando su nueva primavera. Como guardiana de lo sagrado. Y me pregunto: ¿acaso este año el frío será cruel para ellas?
Tendré que cobijar sus ramas vacías.»
-Mabel Lavandeira (Via: Sophia online)