
«En la vida de las abejas encontramos una gran lección.
En general, el hombre construye para sí, piensa en el valor de la propiedad, ambiciona conseguir más bienes, sufre y pelea ante la inminencia de perder aquello por lo que luchó por conseguir.
Prisionero en un plano denso, pierde oportunidades de experiencias superiores.
En cambio las abejas fabrican su alimento sin destruir nada, además, donan la mayor parte.
La lección de las abejas está en su espíritu de donación.
En un acto poco común de desapego, abandonan lo que les llevó una vida construír.
Simplemente lo sueltan, sin preocuparse por el destino que tendrá.»
-Anthony de Mello (1931-1987)


Bendiciones Cristina!
Me gustaMe gusta