
«Llorar a lágrima viva.
Llorar a chorros.
Llorar la digestión.
Llorar el sueño.
Llorar ante las puertas y los puertos.
Llorar de amabilidad y de amarillo.
Abrir las canillas,
las compuertas del llanto.
Empaparnos el alma, la camiseta.
Inundar las veredas y los paseos,
y salvarnos, a nado, de nuestro llanto.
Asistir a los cursos de antropología, llorando.
Festejar los cumpleaños familiares, llorando.
Atravesar el África, llorando.
Llorar como un cacuy, como un cocodrilo…
si es verdad que los cacuíes y los cocodrilos
no dejan nunca de llorar.
Llorarlo todo, pero llorarlo bien.
Llorarlo con la nariz, con las rodillas.
Llorarlo por el ombligo, por la boca.
Llorar de amor, de hastío, de alegría.
Llorar de frac, de flato, de flacura.
Llorar improvisando, de memoria.
¡Llorar todo el insomnio y todo el día!»
-Oliverio Girondo
Lloronas somos todas
Pero,todas
Como si lo femenino
Fuera una lágrima que va rodando
Me gustaMe gusta
Y tan necesario!
Lo que he drenado cuando lloro… una especie de liviandad tan rara, no?
Me gustaMe gusta
Si un sentir que moris llorando,pero resucitar del llanto,y dar ĺas gracias por toda esa sal que nos salio ,nos libero, nos suspiro, aliviadas de sensibilidad extrema
Me gustaMe gusta
… es asi!
…morir y resucitar… renacer y dar gracias siempre por estar vivos y poder S E N T I R!
Me gustaMe gusta
Sos tan linda Eddita!
Me gustaMe gusta
¡Que momento de paz! Gracias por este oasis de reflexión, hoy tocó llorar.
Me gustaMe gusta
Bienvenida la llantina que nos da paz (luego vendran las risas)
Me gustaLe gusta a 1 persona