.las cartas más apasionadas del mundo-Entregadas IV

Scroll down to content

.las cartas más apasionadas del mundo-Entregadas IV

Antes de encontrar a su Matilde (a la que haría inmortal en sus sonetos y en sus canciones de amor), Pablo Neruda estuvo perdidamente enamorado de una mujer, a la que llamaba Albertina Rosa en sus cartas.
Albertina esquivó a menudo a Neruda y no le aceptó nunca totalmente. Aunque llegó a celebrar un matrimonio para intentar olvidarla, él era un hombre totalmente entregado:
«Mi mocosa, queridísima lombríz mía de mi alma, arañita, juguete, corazoncito, arena, arabella, amareza, amapola, abeja, caracola, Rosa Albertina, mocosa feúcha… ¿por qué peleas conmigo? Si no te escrito ha sido porque Rubén, tu hermano macaco, todos los días dice que se va, y no se va nunca ese murciélago, con el que te mando mi retrato. Estoy con jockey para ganártela con tú estabas con quitasol ¿Por qué te alternas, mi mocosa del alma mía? ¿No sabes que aunque te escriba siempre estoy pensando en tí? Yo te escribí con Rubén, ahora no sé qué decirte, tú me escribes unas cartas pequeñas como moscas que con tus garabatos encima se ven más chicas. Pobre, estoy pobre hasta la muerte, tanto que habría deseado mandarte cosas para que te entretuvieras. Al fin me verás y tendrás con quién pelear.
Te besa tu
PABLO

-Seleccion de Alicia Mizrahi

Deja un comentario