
«Dios va conmigo a todas partes, porque Dios está en mi mente.
Dios no está fuera de mí, sino que vive dentro de mi corazón.
Vive en mi mente, como yo vivo en Él.
No hay nada que pueda hacer, y en ninguna parte puedo ir, que me puede separar de Dios.
Creer en una separación entre yo y Dios está en el centro de todos mis problemas. Para él no
existe tal separación. No estoy solo, porque Dios está siempre conmigo.
No hay ningún problema que él no puede resolver. Me guía para el pensamiento y la acción correcta cada
vez que lo solicite. Él forma parte de todas las aguas y calma todas las tormentas, a través de su espíritu que vive dentro de mí.
No importa lo que paso hoy, no tengo que temer.
Para Dios es omnipotente y Dios está aquí. Nunca estoy separado de Aquel que me creó. Soy amado, estoy cuidado, y estoy totalmente seguro en los brazos de Dios.
-Tomado de «Un Año de los Milagros», Marianne Williamson
Gracias Gaby!!! Precioso texto ❤️
Me gustaMe gusta
Gracias Solecito. Abrazote!
Me gustaMe gusta